Diario De Sancho Panza

Yo soy Sancho, el fiel escudero de Don Quijote,
y en este blog les cuento todas las aventuras
que pase con mi amo. Son muy interesantes.
Espero que les guste!

domingo, 3 de abril de 2011

Capitulos 27-31

Cuando vimos que ya estábamos seguros y que nadie mas nos seguía pero lo mejor de todo que ya nadie nos iba a tirar mas piedras, estuvimos tranquilos y empezamos a hablar y tras de todo mi amo se me pone a reclamarme que porque me había ido y entonces yo me enoje y le dije que porque me había dejado atrás con todo lo que yo lo cuidaba, y ahí seguimos, la verdad ya no valía la pena pelear menos con Don Quijote que según el siempre tenia la razón pero bueno. Luego empezó con una historia que los escuderos siempre defendían  a su amo y que yo debía de haber hecho eso para que luego el saliera a pegarles a todo y salir campeón pero claramente no hubiéramos podido ganar eso de ninguna forma, nos agarraron a pedradas yo no se si no le había quedado claro a Don Quijote eso. Después paramos una alameda para pasar la noche, pero yo ya estaba demasiado cansado de todo esto, no podíamos pasar una bueno noche en estos lugares era demasiado incomodo dormir así y tener que aguantar golpes y cuidarle las espaldas a este señor. Al final de todo tuve una fuerte discusión con mi amo, me trato un poco mal, pero tengo que admitir que no tengo mucho que exigir soy una persona común y corriente he sido un poco afortunada pero es todo. No quiero dar mas detalles de mi pelea con Don Quijote porque no es algo agradable. Asi que me quede con mi amo viendo a ver que mas me esperaba en esta vida, unos días después nos encontramos en el camino con un lago, donde había un barco, como mi amo no podía ver nada sin imaginarse toda una historia invento que tenia que ir a montarse al barco porque lo llevaría donde había un caballero que tenia que salvar. Yo sabia que no tenia que montarse ya que yo había visto que este barco era de unos pescadores pero así de necio es Don Quijote. No quiero ni recordar lo que nos paso, porque me arrepiento cada ves mas de seguir aquí con este señor tan necio. Terminamos en el agua y de todo. Así que nos fuimos y seguimos en nuestro camino hacia Zaragoza. En el camino nos encontramos a un Duque y una Duquesa, ellos reconocieron a Don Quijote ya que habían escuchado de el. Gracias a Dios y gracias de nuevo a la suerte que tengo estos señores nos invitaron a pasar unos días a su castillo, ya que ellos eran lectores de libros de caballería y les había gustado la hablaba que les había dicho Don Quijote. En el camino los duques nos dejaron atrás y se metieron ellos de primeros al castillo, cuando nosotros llegamos por la venta y todo nos trataron super bien, como si fuéramos los mas famosos caballeros, pero en realidad a mi todo esto me parecía un poco raro. Pero no me importo mucho ya que cuando entramos nos invitaron a la cena, y claro la cena siempre era lo mas importante para mi, pero como siempre Don Quijote se puso a pelear a ver quien hacia la mesa por dicha no duraron tanto y nos sentamos a cenar. Después de la cena el cura que nos acompañaba empezó a criticar a Don Quijote rarisimo decía que era loco y yo no se que cosas mas, la verdad no puse mucha atención yo estaba feliz con la cena que me acababa de comer